miércoles, 17 de diciembre de 2008

Alcanzando el Zenit

Le ruego perdón a quien esto leyere por tres motivos, a saber: la duplicidad de este artículo (publicado a su vez en el desfachatado Algún día), el retraso en su redacción y el sigilo mostrado al respecto por mi parte. Es comprensible temer que, de haber anunciado que iba al Bernabeu, este blog se habría colapsado con centenares o miles de comentarios –ya será menos, me autoapostillo– apiadándose de mí y murmurando que no sabía dónde me metía.
Ciertamente, ser merengón en la actualidad conlleva un grado de lástima que está a medio camino entre declararse fan de Locomía y estar enganchado a Michinoku. De hecho, no está el asunto para bromas, a tenor de lo comprobado en el antes y el después del encuentro. Pero el durante, desde luego, mereció mucho la pena.
Mi bagaje futbolístico en vivo y en directo se limitaba sólo a un anodino Extremadura-Eibar, saldado con un desangelado empate a cero. Por tanto, mis acompañantes (el inimitable Chimo y Aurelio, nuestro hombre en Madrid y augusto presidente becaril) dedujeron que presenciar un partido del Real Madrid contra el Zenit de San Petersburgo en el mismísimo templo pagano del Santiago Bernabeu sería la mejor experiencia de mi vida. Falso: todavía no he viajado a Baracaldo en metro ni han llevado a la gran pantalla las Páginas Amarillas de Albacete.
Aún así, la fugaz visita a la capital deparó un cúmulo de acontecimientos y tunantadas dignos de La ciudad no es para mí. Por vez primera fui a un Vips y a un Museo del Jamón; montamos una manifestación espontánea en la Puerta del Sol para protestar contra Espe; nos horrorizamos con Cortylandia y terminamos mezclando el "Somos balleneros" de Futurama con el himno de la Champions.
Otrosí, entre otros sucesos poco luctuosos, amagamos con vomitar en los vomitorios del estadio; deambulamos sin éxito por un medio desierto centro urbano antes de las doce para tomarnos un algo –qué daño hace Salamanca a nuestra concepción del ocio nocturno–; Aurelio no se abrazó a ninguna alubia gigante; Chimo casi intima con unos machotes rusos en el albergue y yo, en el piso de mis majérrimos anfitriones Mario e Ire, rezaba para que la enjutomojamutización de éstos no fuese más allá de la perturbadora foto de Michael Jackson con E.T. clavada en la pared.
¿El partido en sí? Pues tres a cero, golazo de Raúl incluido, lo cual llena de orgullo y satisfacción a un servidor de ustedes, uno de los últimos raulistas vivos.
Hala, ya lo dije. Y bien a gusto que me quedé.

3 comentarios:

christian dijo...

hola soy christian creador de futbolargentinosolo.blospot.com y queria proponerte un intercambio de link haci nos visitamos mutuamente bueno espero que me agreges a tus enlaces avisame asi te agrego
nos vemos.saludos

Allek dijo...

maraviloso blog....
un abrazo.

Anónimo dijo...

Hola que tal mi nombres es Steffy, y veo que su blog
es original con mucho contenido realmente interesante.

Por otro lado cuento con un directorio llamado "Mundo Inicio" me gustaría saber si usted
está interesado en formar parte de el, a cambio le pediría de favor si podría enlazar uno
de mis 2 blogs que tengo, una es de "apuestas deportivas" y la otra habla sobre la
"ruleta y casinos en general". Porfa si estas interesado o quieres saber más al respecto no
dudes en contactarme: sist.deruelta@hotmail.com
Un fuerte abrazo. Saludos
Atte: Steffy